14 febrero 2010

Todo está aquí o en los libros: divino tesoro

Es verdad que cada día los jóvenes de Zalamea son más altos y lustrosos. En España las nuevas generaciones tienen casi cuatro centímetros más de altura que hace veinte o treinta años, no lo digo yo, es cuestión de los expertos que aseguran que la prosperidad económica es el motivo de que nuestros hijos y nietos se asomen a las alturas. A la altura final a la que puede llegar una persona depende de muchos factores entre los que se encuentran la alimentación, es decir, el papeo, la higiene y la actividad física aunque todo es relativo pues hay quien el único ejercicio que hace es levantar el vaso de whisky o la manguara en el mostrador de cualquier bar zalameño y, sin embargo, casi todos lleva el camino de ser como los baloncetistas hermanos Gasol. De todas formas una cosa es cierta: lo importante es el cerebro, el ser buenas personas, lo demás es, o debería ser, algo menor.